lunes, 15 de abril de 2024

ENCUENTRO MISIONERO DE JÓVENES 2024

 


 Este fin de semana tenía lugar el Encuentro Misionero de Jóvenes, que organizan cada año por las Obras Misionales Pontificias que, con el lema “Tu primera misión” y dedicado a la oración, ha reunido a más de un centenar de jóvenes llegados desde toda España. El encuentro tuvo lugar en el Real Centro Universitario María Cristina de San Lorenzo de El Escorial, con la experiencia de estar en un lugar único por su arquitectura y por el paisaje de la Sierra de Guadarrama.

El viernes por la tarde, tras la acogida y después de la cena, se vivió una velada llena de alegría en la que el mago Javier Shalom fue hilando trucos de magia y su propia experiencia misionera con el mensaje que iba a ser el eje del encuentro: la oración y la misión.

La mañana del sábado, tras la Eucaristía y la “dinámica de presentación” de todos los asistentes, tuvo lugar la conferencia de la influencer Carla Restoy, que dio su propio testimonio de oración diaria, una estrecha relación con Dios, para la que hay que establecer una rutina, dedicándole a Él el mejor momento del día. Una relación diaria que hace que se pueda volver a Dios una y otra vez en una experiencia de conversión constante. Tras la conferencia se desarrolló una dinámica con las frases y peticiones del Padrenuestro y el Avemaría y la riqueza y diversidad de experiencias, que estas palabras rezadas tantas veces suscitan en cada persona. La adoración puso el broche de la mañana, “una adoración normal” –decía uno de los participantes–, “es decir, intensa, profunda”. Y con el Rosario Misionero en la explanada del Monasterio de El Escorial se abrieron las actividades de la tarde, con la música del grupo misionero Jatari y el tradicional mensaje de universalidad de los colores de los continentes. Los testimonios misioneros de María del Pino Rodríguez de Rivera, de las Misioneras del Santísimo Sacramento y María Inmaculada, y Asunción Tejedor, llegaron mucho a los jóvenes, por la importancia que dieron a la oración como fuente de toda labor misionera. La tarde concluyó con el Vía Crucis que recorrió el claustro del Centro María Cristina.

La Misa dominical del día siguiente dio paso a la dinámica “¿Rezamos los jóvenes?”, del laico misionero Sergio Escudero. Explicó que era “adicto a las misiones” porque en los lugares a los que va encuentra a Dios, aunque también manifestó los problemas que se pueden experimentar al estar en misión. A la pregunta de uno de los jóvenes sobre lo escaso y poco que parece ir a un verano misión cuando los misioneros dan la vida, Sergio recordó cómo valoró Jesús en el Evangelio el pequeño óbolo que dio la viuda como donativo al templo: “Si tienes un mes de vacaciones y te vas a la misión, estás dando todo lo que tienes como aquella mujer”.

El encuentro concluyó con la presentación de actividades de animación misionera, la “guía compartir a la misión” que recoge grupos, modalidades y formas de realizar una experiencia misionera, la nueva app de Supergesto y cómo tener como referencia para todo lo que se necesite a la delegación de misiones de la propia diócesis. Los jóvenes que han participado han expresado su convencimiento de que se trata más de ser que de hacer, más de estar cerca de la fuente de la misión, el Señor, que llevar a la práctica una hoja de ruta más o menos sofisticada y elaborada, y que la misión es mucho más que un simple partir a un lugar. Es estar cerca de Dios para descubrirlo en lo demás.