Encendemos el tercer cirio.
¿Qué cosas habría que cambiar para construir un mundo mejor? Algo así le preguntaban
a Juan el Bautista quienes querían prepararse para la llegada del Mesías: “¿Qué tenemos
que hacer?” (Lc 3,10.12.14).
El Bautista nos da un consejo fantástico: “El que tenga..., que comparta” (Lc 3,11). Y es
que si somos justos, si no somos “abusones”, si pensamos en los demás, todo funciona
mejor y aparece esa alegría por la llegada de Jesús que ya empezamos a presentir.
Así que ALEGRÍA y... ¡a compartir!
ACOMPAÑANDO A MARÍA Y JOSÉ
En su caminar hacia Belén, María y José experimentaron las necesidades de muchas
otras personas que esperan nuestra ayuda:
“En los pasos de José y María se esconden muchos pasos. Vemos las huellas de familias
enteras que hoy se ven obligadas a marchar. Vemos las huellas de millones de personas
que no eligen irse, sino que son obligados a separarse de los suyos, que son expulsados de
su tierra. En muchos casos, esa marcha tiene solo un nombre: supervivencia”.
(Papa Francisco)
REFLEXIÓN
Busco o recuerdo el testimonio de algún misionero que lleva el amor de Jesús a
los más necesitados. ¿Cuál es la causa de su alegría, incluso en situaciones muy difíciles?
COMPROMISO
Realizo alguna acción que me permita compartir mis cosas o mi tiempo: ayudo a
un compañero a estudiar; renuncio a unas “chuches” y ofrezco ese dinero para ayudar a
otros niños a través de Infancia Misionera...
ORACIÓN
“Pequeño Niño de Belén,
muévenos a reconocerte en todos aquellos que llegan a nuestras vidas”.
(Papa Francisco)